Colaboración y Análisis Económico-Financiero
Mtro. Víctor Hugo Galicia Soto.
Según la encuesta de conocimiento y percepción del sistema de ahorro para el retiro (SAR) 2013, de un total de 3221 personas encuestadas, 66% no tiene el hábito de ahorrar y solo 34% guarda una parte de sus ingresos para utilizarlos en un futuro lo que significa que 3.5 puntos porcentuales arriba de los resultados de la encuesta del 2006.
Lo anterior pone de manifiesto una falta de educación financiera, un desconocimiento de algunas alternativas para ahorrar pero sobre todo un aspecto cultural.
El estudio realizado por la Comisión Nacional del Ahorro Para el Retiro (CONSAR), arroja que del total de los encuestados, 7.2 % ahora pensando en su vejez, lo que demuestra que la mayoría de la población no se visualiza fuera de la vida laboral
En cuestión de aportaciones voluntarias, únicamente el 2.6% de los encuestados realizo este tipo de contribuciones a su cuenta del ahorro para el retiro, pese a que hacerlo representa que el trabajador tenga más recursos acumulados para su vejez y así su pensión sea mayor.
Desconocimiento y desconfianza son las principales causas por las que 97.4% no realizó ningún aporte voluntario
Pero solo nos estamos refiriendo a esas personas que cuentan con un empleo formal, que reciben un salario o sueldo y que están dadas de alta en el IMSS. ¿Qué pasa con esa población que se desarrolla en la economía informal?, ¿Cuando hablamos de ahorros por sus ingresos?, el panorama es aún más crítico.
Porque aún hay más; de acuerdo con la CONSAR, la población más proclive a realizar aportaciones voluntarias es la que muestra un mayor conocimiento sobre el sistema de ahorro, aunque desconoce a detalle el monto que recibirá de pensión
51% de la muestra no ha considerado de que va a vivir en su vejez, lo que refleja la poca previsión que tenemos los mexicanos sobre el futuro. Asimismo33% piensa que vivirá de su pensión y 16% afirma que tiene una forma alterna a esta, como vivir de su negocio propio o del guardadito que tiene abajo del colchón.
La calificación promedio que le dan los encuestados a su afore en el 2013 es de 7.7 y uno de cada tres trabajadores le da la calificación de 9 o 10. Esta calificación demuestra que, aunque no se está reprobando a las afores, los trabajadores no están tan contentos con lo que reciben por parte de estas.
Y ello se vuelve un círculo vicioso, se desconoce, no se ahorra, no se ahorra porque no alcanza, no se alcanza porque todo sube y así sucesivamente
Esta falta de cultura para el ahorro, no es más que una falta de voluntad, ya que el mexicano promedio tiene un gasto hormiga de alrededor de los 13 mil pesos anuales, si ello lo ahorrara en algún instrumento o producto este fenómeno sería diferente
Pero el fenómeno de no ahorra va más allá de no poder, una situación que se vive en la cultura del mexicano, es la falta de previsión, el dicho “Mañana dios dirá” ha provocado en los ciudadanos el enfrentar las cosas al día, el someternos a presiones innecesarias ante lo cual, para enfrentar una eventualidad es casi imposible y lo más triste es que menos se prevé el futuro.
Lo mismo sucede en el contexto de la educación, en las escuelas de nivel básico, ante la situación de pobreza que hoy se vive, ya es casi imposible pedir a los padres de familia que fomenten el ahorro entre sus hijos, para que se aprenda y se cultive este hábito, que más adelante les permitirá enfrentar eventualidades.
Ante tal situación es importante fomentar la cultura del ahorro, ya que esta depende más de educación de que si nos sobra para ahorrar, ello nunca será. Pero lo que sí se puede promover, es que se haga el propósito de guardar solo el 10 por ciento de sus ingresos y usted vera como al mediano plazo contara con algunos centavos que le permitirán enfrentar una eventualidad.
Hágase el propósito y vera como si quiere puede.
Hasta aquí mi comentario y hasta la próxima
