Este fin de semana tuvo lugar el acto de clausura del Taller de Arqueoastronomía, cuyos resultados arrojaron importantes conocimientos en la materia, que a propuesta del científico Ismael Arturo Montero García, es de suma importancia que los estudios realizados en la Quemada y Altavista, se incorporen al discurso de los guías de turistas, así como también se coloquen en la propagada que el Estado hace del turismo local.
Añadió, que si bien la belleza es excepcional en estos sitios arqueológicos y su historia magnifica ahora se puede incrementar la erudición demostrada en la Arqueoastronomía, a la difusión turística lo que vendría a enriquecerla, al identificar las principales orientaciones astronómicas con la arqueología de la entidad.
En la Sala de la Bóveda II del Centro Cultural Ciudadela del Arte, durante la conclusión de los trabajos científicos y de campo realizados, el Dr. Ismael Arturo Montero García, Director de la Unidad de Post Grado de la Universidad del Tepeyac, indicó, que hay valiosos estudios sobre el ejercicio que se aplicó con los participantes al curso, en las zonas arqueológicas antes mencionadas.
Señalo, que el objeto de dicho taller fue compartir con las unidades científicas del estado especialmente la Unidad Académica de Arqueología de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), el Instituto Zacatecano de Cultura (IZC) “Ramón López Velarde” y con el Museo Zig-Zag, la experiencia de esta ciencia.
Señaló el Dr. Montero, que en fechas recientes la cultura de la arqueoastronomía en los discursos académicos de la arqueología a nivel mundial, ha cobrado importancia y las investigaciones que ya se habían realizado previamente requieren ser ampliados.
Que el curso tuvo por objetivo fomentar entre los estudiantes e investigadores el interés por la arqueoastronomía, debido a que existen muchos sitios importantes en esta disciplina científica en Zacatecas.
Indicó, que fue un curso que buscó sembrar el interés para desarrollar investigaciones por personas de Zacatecas, en sus propios territorios arqueológicos y de ahí pasar al norte de México; puesto que hay cientos de estas vetustas áreas tradicionales, que fueron orientadas hacia el cosmos con la naturaleza, sitios de carácter ritual, aclaró.
Referente a la Quemada y Altavista, el arqueólogo opinó que “Son sitios monumentales que por su complejidad arquitectónica regalan una posibilidad de lectura en el país, en especial la trayectoria que recorre el sol en el horizonte anualmente y que es la relación entre montañas y astros.
Destacó el científico, el trabajo arqueológico que se ha venido realizando por años; “Nos permite ahora dedicarnos a observar el horizonte y lo que estos monumentales espacios deben estar viendo, por ello, es muy afamado en el mundo el caso de Altavista, Chalchihuites”.
Agregó, “Creemos que la Quemada ofrece también una serie de posibilidades sorprendentes sobre todo el “Salón de las Columnas” que nos recuerda un templo griego en su magnificencia y que además, para hacerlo más complejo las columnas están haciendo un juego de luz sombra y orientación”.
Consideró, que este lugar es como un observatorio astronómico, a partir del cual los rayos del sol hacen una serie de juegos que nos van a decir la fecha calendárica, que en ese momento para ellos era significativa.
Explicó, que lo que se descubrió aquí, es la erudición ancestral que si bien ya la habían percibido en el altiplano, en la zona maya, ahora se localiza en la zona norte de México, es el caso de Zacatecas.
Detalló que esto se debe en esencia a que el sol es cenital entre el trópico de cáncer y el trópico de capricornio, de tal suerte que el “sol cenital” les permitió calibrar el año de una manera muy precisa, ya que apuntó, que la misma iglesia católica tuvo que cambiar en el Siglo XVI del Calendario Juliano al Gregoriano porque se había desfasado 10 días su calendarización.
Comentó, que los chinos en el Siglo XVII también estaban desfasados, obviamente tanto China como el norte de Europa aunque tenían altos conocimientos de astronomía no tenían por decirlo así, la “bendición” de un “sol cenital” que permite calibrar el año con suma precisión.
Explicó, que el “sol cenital” justamente se localiza en el límite de Zacatecas y Altavista, es el punto, porque de ahí hacia el norte, el sol nunca va a ser cenital, sin embargo, ahí, en este punto hacia el sur, sí, o sea que estamos en la frontera de una posición del sol que empezamos a estimar fue significativa para las culturas ancestrales.
Lo que lleva a considerar que si bien Altavista ya está discutida y publicada fijemos ahora nuestra atención en la Quemada, que también es muy importante escudriñar en el horizonte y donde los estudios más sobresalientes ofrecieron una visión astronómica de las ruinas de Altavista y la Quemada, con bases científicas sobre estos sitios prehispánicos.
En particular sobre Altavista, Chalchihuites, donde el centro ceremonial y su estudio sobre el Trópico de Cáncer, es sin duda una tesis más completa acerca de la astronomía y las referencias más precisas acerca de la arqueoastronomía al estimar la posición del sol, fenómeno que nunca tendrán en otros continentes.
Finalmente, Montero García, agradeció la armonía y el entusiasmo de las instituciones al trabajar en un fin colectivo; expresó su gusto por Zacatecas y reiteró su agradecimiento a las instituciones involucradas por el gran apoyo brindado.
Esta actividad fue promovida por el Gobierno del Estado a través del Instituto Zacatecano de Cultura (IZC) “Ramón López Velarde”, el Museo Arqueológico La Quemada y el Centro Documental de la Unidad Académica de Arqueología de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ).
Por su parte autoridades del Instituto de Cultura de Zacatecas, hicieron entrega de reconocimientos a los asistentes, en manos del Director la Ciudadela del Arte Manuel Meza Montalvo y del Subdirector de Investigación y Enseñanza de esta dependencia, Héctor Ávila Ovalle.
