Durante la gira intensa que hizo el candidato a diputado federal de la Alianza PRD-PT, Antonio Mejía Haro por los municipios de Monte Escobedo y Tepetongo, la gente lo que más le solicitó fue empleo, la construcción de presas y la atención al campo.
Toño Mejía recorrió varias comunidades del municipio de Monte Escobedo, acompañado de las dirigencias municipales del PRD y PT, donde se comprometió a seguir impulsando la construcción de presas y sistemas de riego, como las que apoyó como Secretario de Desarrollo Agropecuario del Gobierno del Estado, como fueron en Monte Escobedo: la presa María de la Torre y la tecnificación de las zonas de riego en las presas Independencia Nacional y la Tetarrona, y en Tepetongo la zona de riego de la presa la Cuadrilla.
«Tengan la seguridad que seré un diputado que gestionaré recursos para realizar estas obras hidráulicas que mejoren la agricultura, el desarrollo agropecuario y la generación de empleos». De igual manera, etiquetaré recursos para la construcción de agroindustrias que den valor agregado a la leche, carne y a las cosechas agrícolas, y con ello se acceda a más y mejores canales de comercialización y se logren mejores precios de los productos del campo.
En entrevista telefónica con dos radiodifusoras de Los Ángeles, California el candidato Mejía Haro dijo que hay una deuda histórica con nuestros migrantes que radican en los Estados Unidos, quienes se vieron obligados a migrar por falta de oportunidades en nuestro país, se fueron dejando a su esposa, sus hijos, padres y hermanos, se fueron arriesgando muchas veces su vida en la frontera, al cruzar el río o el desierto, se fueron en la búsqueda nuevos horizontes para sus familias.
Toño Mejía dijo nuestros migrantes han contribuido con las economías de Estados Unidos y de México, más en Estados como Zacatecas, los migrantes con sus remesas y apoyos bajo el programa 3X1 han contribuido con obras importantes en sus comunidades de origen relacionadas con sistemas de agua potable, drenaje, pavimentaciones, centros de salud, aulas escolares entre otras.
Es por ello, que ahora los gobiernos deben empezar a saldar esa deuda con nuestros migrantes, generando condiciones de empleo, educación, salud y vivienda a sus familias para que sus hijos se arraiguen en sus comunidades y no tengan que migrar a los Estados Unidos como lo hicieron sus padres.
