Durante ciclo académico que organiza el Museo de Guadalupe, el docente investigador de la Maestría en Historia de la UAZ, Marco Antonio Flores Zavala, ofreció la conferencia magistral: “Liberales y liberalismos en la Constitución general de 1917”, en ella hizo referencia a las diferencias sociales que dieron origen a la creación de la Constitución Federal de 1917.
El investigador señaló que este documento fue creado en una época fundamental en la que además del autoritarismo de Victoriano Huerta había la necesidad entre la población del país por tener un documento que defendiera los derechos de los más desposeídos. Sin embrago, afirmó que su creación se basó en un idealismo social, que pretendía tener y conservar algunos de los principales derechos del mexicano del primer cuarto de siglo XX.
La Constitución, explicó, se deriva del pensamiento de las corrientes revolucionarias como la villista, carrancista y zapatista, proyectos populares que de manera simbólica pretendían el bienestar general de la población. El país estaba cubierto de diversos pensamientos, el villismo en el norte, el zapatismo en el sur y el carrancismo en el centro del país, este último era burgués en términos de izquierda, los tres eran proyectos sociales diferentes que se plasmaron en una visión de estado según la necesidad social de los individuos de esa época.
Flores Zabala reconoció que otros de los movimientos sociales que le dieron vida a la Constitución Federal de 1917, fueron los que facilitaron el paso a la creación de las agrupaciones obreras que paulatinamente cobraron fuerza para que se construyera el documento que hoy nos rige.
Finalmente, expuso además cómo fue el entorno social que confrontó el proyecto laico de la Constitución y el liberalismo social, por lo que enfatizó que sin el catolicismo social sería difícil entender la creación de la Constitución que cumple 100 años de su creación.