A unos días de que inicie la temporada de novilladas 2017, la alcaldesa Tere Jiménez, anunció la ratificación del Arquitecto Ignacio Rivera Río como Juez de Plaza, a quien reconoció por su trayectoria, conocimiento y difusión de la fiesta brava, una de las más importantes tradiciones de los Aguascalentenses.
“En su persona tendremos a alguien objetivo y a la altura de lo que requiere la afición de Aguascalientes y también la gente de México y de otros países que vienen a la Feria Nacional de San Marcos. Depositamos en usted toda la confianza para que sea una persona objetiva y con todo el conocimiento en esta área, por lo cual tiene todo mi reconocimiento”.
Acompañada por el secretario del Ayuntamiento, Leonardo Montañez y por los regidores Marly Fabiola Carranza, Mónica Ledezma Gallegos, Salvador Maximiliano Ramírez Hernández, los síndicos, María de Jesús Ramírez Castro y Luis Alberto Rivera Vargas, así como el director de Reglamentos, José de Jesús Aranda; la Alcaldesa destacó la importancia de tener como Juez de Plaza a una personalidad del ambiente taurino que cuenta con el conocimiento, la objetivad y la experiencia para actuar como autoridad en uno de los seriales taurinos más importantes del mundo.
En esta ocasión el Juez de Plaza contará con el apoyo de los matadores de toros Roberto Ramírez Gallegos “El Oriental”, como cambiador de suertes, y Francisco Manuel Olivera “Bombita”, quien fungirá como asesor.
Al recibir su nombramiento, el arquitecto Ignacio Rivera Río agradeció la confianza que le otorga la Presidencia Municipal al ratificarlo en su encargo, sobre todo, a sabiendas de que los festejos taurinos que se realizan en Aguascalientes, son determinantes en la carrera de muchos novilleros y matadores de toros.
“Para mí es un gran honor tener nuevamente la responsabilidad del serial taurino de la Feria Nacional de San Marcos. Nuestra feria está reconocida a nivel mundial como la primera feria de América, aquí en Aguascalientes si un torero triunfa trasciende en el mundo del toro, y la reflexión es que no olvidemos que si bien es feria, es fiesta, no se debe rebasar el límite de la seriedad que la fiesta brava implica”.
Cabe hacer mención que el Arq. Ignacio Rivera Río, nació en una ganadería de Hacienda de Cieneguilla, donde desde pequeño estuvo en contacto con el toro bravo; su abuelo paterno fue dueño de la Ganadería de Begoña, su abuelo materno fue caporal, y tiene además tíos toreros por lo que prácticamente toda su vida ha estado inmerso en el ambiente taurino.
Su inicio como Juez de Plaza se dio en 1998, aunque también ha participado como asesor de diferentes jueces, cambiador de suertes durante 6 años, siendo en el trienio anterior Juez de Plaza, nombramiento en el que ha sido ratificado por la alcaldesa Tere Jiménez.
Rivera Río ha presidido en plazas como Jalostotitlán, Jalpa, San Miguel El Alto, Calvillo, Jesús María y Encarnación de Díaz, entre otras de la región, por lo que cuenta con una extensa trayectoria en la materia:
“Nos hemos ido fogueando en esto; cada tarde de toros se sufre, todas las corridas son diferentes, cada tarde pasamos tragos amargos pero hemos aprendido que nuestro trabajo va encomendado a que el público salga satisfecho y creo que hemos hecho un trabajo que ha cumplido en ese aspecto”.
Finalmente, destacó que más allá de la polémica, mientras un torero dé lo mejor de sí, con una faena hecha y la entrega de una afición conocedora como la de Aguascalientes, la “Pelea de Gallos” seguirá sonando y la fiesta brava seguirá siendo parte fundamental de nuestra cultura y tradición.