No Deben Presionarse Aumento al Precio de Tonelada de Maiz

Juan Pablo Rojas Pérez, Presidente de la Confederación Nacional de Productores Agrícolas de Maíz de México, aseguró que los productores de maíz consideran que demandar un pecio de 4 mil 200 pesos por tonelada del grano sería factor que contribuiría a elevar el precio del kilogramo de la tortilla y con ello más hacer más inaccesible la canasta básica alimentaria de tal suerte que es más indispensable una política integral de fomento de infraestructura, de extensionistas ya en este caso existe un déficit y las universidades como Chapingo y la Narro deberían estar impulsando la vinculación con los técnicos.

 

Asimismo, recordó que el productor mexicano no tiene acceso a las tecnologías de transgénicos debido a los altos costos y debido a que éstas ya están rebasadas, México al ser autosuficiente en producción de maíz blanco podría también serlo en amarillo si el Gobierno Federal invierte en infraestructura de almacenaje, de carreteras saca-cosecha y de insumos más baratos pues tan solo el flete de traslado del sur-sureste al centro del país representa el 50 por ciento del valor total de la tonelada de este alimento.

 

En conferencia de prensa donde dio a conocer la celebración del Cuarto Congreso Nacional Maicero a celebrarse en Jalisco el 6 y 7 de noviembre en Jalisco con la presencia del titular de Sagarpa, José Calzada Rovirosa, el líder de la CNPAMM, detalló que un aumento en la materia prima, es decir en el precio del maíz, generaría un incremento en la canasta básica la cual sigue inalcanzable.

 

Si bien, dijo, entre el 2017 a 2018 se estima la producción nacional en 26 millones de toneladas de maíz, también es cierto que entre un 2.5 y un 2.8 por ciento será de amarillo cuando la demanda en el país es de 17 millones de toneladas y por tanto se tienen que importan 14 millones de toneladas de maíz amarillo.

Con este panorama, indicó, la realidad indica que el precio real de la tortilla debería ser de 8 pesos el kilogramo y no doce o más como actualmente se comercializa.

 

Además, expuso, México está perdiendo una gran oportunidad de producir maíz amarillo para satisfacer la demanda nacional pero ello se debe a la falta de inversiones adecuadas, estratégicas y oportunas para que el productor capitalice su producción.

 

Explicó que si bien hay suficiente maíz blanco en el país para satisfacer la demanda se carece de infraestructura saca-cosecha como carreteras y bodegas lo que llega a generar un “cuello de botella” para garantizar el traslado del producto del sur al centro del país de tal suerte que “urge una política integral que garantice el extensionismo rural, la capacitación al productor, la creación de nueva infraestructura y la organización”.

 

Juan Pablo Rojas Pérez, quien se pronunció por la producción de maíz sustentada en los criollos e híbridos con estrategias de conservación y reproducción para satisfacer la demanda, detalló que las únicas entidades federativas con infraestructura para la producción del maíz son Jalisco, Sinaloa, algunas zonas del estado de México, Guanajuato, Michoacán y Tamaulipas cuando el trópico es donde hay más potencial productivo sin aprovechar como es Morelos, Veracruz y Puebla, entre otros.

 

El líder de la CNPAMM comentó que con falta de infraestructura y de extensionistas, se complica el tema de la producción porque si bien hay suficientes agrónomos no existe un vínculo real de estos especialistas con el surco pues en los últimos 20 años estos especialistas se han vuelto insensibles de lo que pasa en el campo.

 

Lo anterior debido a que se sujetan a contratos temporales que otorga Sagarpa y quieren invertir tiempo con el productor y esperar a que éste les pueda pagar cuando termine la cosecha.

 

Así, Juan Pablo Rojas Pérez, hizo un llamado no solo a los extensionistas sino también a legisladores, a políticos, gobiernos locales y estatales así como federal para que se arriesguen al igual que el productor para producir más y mejor.

 

 

Comparte esta nota!