Por unanimidad, de 26 votos a favor, se aprobó el punto de acuerdo presentado por la diputada Lorena Esperanza Oropeza Muñoz, integrante, del Grupo Parlamentario del PAN para exhortar a la PROFECO a verificar y vigilar las casas de empeño en el Estado.
El propósito es que las prácticas comerciales que se realizan en esos lugares, sean acordes a lo que dispone la ley en la materia.
Dentro de la exposición de motivos, expuso que en la actualidad y con información de la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO), en el Estado hay casas de empeño registradas formalmente, y cumplen los requisitos de ley.
Pero aún existen diversas casas de empeño que operan en la informalidad.
Para su organización y funcionamiento, una casa de empeño, debe estar inscrita en el Registro Público de Casas de Empeño (RPCE), para “brindar seguridad jurídica a las y los consumidores al inscribir y autorizar a los proveedores que ofrecen y otorgan los servicios de mutuo con interés y garantía prendaria, un registro único e intransferible
La Norma Oficial Mexicana NOM-179-SCFI-2016, establece los requisitos jurídicos y comerciales, en las operaciones de empeño.
Agrega en el documento que la situación económica de los Zacatecanos orilla en muchas ocasiones a que estos se vean en la necesidad de dejar como garantía prendaria algún objeto de su propiedad a cambio de recibir un préstamo en efectivo.
Pero actualmente, ya sean formales o informales, muchas casas de empeñó son susceptibles de recibir objetos de procedencia ilícita, puesto que no cuentan con las herramientas o el cuidado suficiente para verificar que el derecho real, legítimo e indiscutible de propiedad le corresponde al consumidor.
“Sin embargo, los establecimientos dedicados a realizar esta actividad, como se ha señalado, son susceptibles de recibir objetos de dudosa procedencia, y en ocasiones no agotan las providencias necesarias para asegurarse de la lícita posesión o propiedad de los mismos”.
Los objetos que usualmente llegan a manos de estos establecimientos son celulares, joyería, aparatos electrónicos y electrodomésticos, equipo de cómputo y fotografía, e incluso calentadores solares.
Los establecimientos de esta naturaleza no sólo son concurridos por aquellos que efectivamente pretenden empeñar una cosa para posteriormente recuperarla con la restitución de lo prestado y sus respectivos intereses, sino que, además, se han convertido en una opción para que los delincuentes conviertan los artículos robados en dinero en efectivo.
El motivo del punto de acuerdo tiene como finalidad inhibir el empeño de artículos robados, mediante controles más rigurosos de para evitar operaciones con bienes robados.
De materializarse efectivamente estas acciones, probablemente se avance en el combate de una vertiente de la delincuencia
Por lo anterior, y en aras de robustecer la protección a los consumidores y el buen funcionamiento de las casas de empeño, resulta viable hacer un atento exhorto a la Procuraduría Federal del Consumidor, para que en el ámbito de sus atribuciones, realice acciones de verificación de los establecimientos a fin de sancionar a todos aquellos que se hallen en una situación irregular.