La JIAPAZ tiene como compromiso permanente garantizar la calidad del agua que distribuye como factor de salud, ya que cumple con todos los parámetros normativos, afirmó Benjamín de León Mojarro, director general del organismo operador, en el marco del Día Mundial de la Salud.
Agregó que personal del Departamento de Calidad del Agua realiza muestreos de manera periódica en los pozos, rebombeos, tanques de distribución y puntos seleccionados en las ciudades y comunidades a las que se da servicio, consciente de la importancia que esto tiene para la salud de la población.
Gracias a este monitoreo permanente, también se verifica que el agua sea de calidad para consumo humano, de acuerdo con la Norma Oficial Mexicana NOM-127-SSA1-1994 y su modificación, con lo que se contribuye a la salud de 400 mil personas en Zacatecas, Guadalupe, Morelos y Vetagrande.
La calidad del agua -explicó- es buena en los términos que marca la norma, aunque son aguas duras por sus contenidos de carbonatos, calcio y magnesio, que es típico de la naturaleza de las aguas subterráneas.
Mensualmente, se realizan 350 determinaciones de cloro residual para control de la desinfección del líquido que se distribuye; bimestralmente, son 98 muestreos de análisis bacteriológico y, semestral, son 137 análisis físico-químicos para medir la presencia de metales y metaloides, PH y otras características.
Aparte, cada año, un laboratorio externo certificado por la Secretaría de Salud, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) certifica la calidad del agua de cada uno de los sistemas de captación de la JIAPAZ.
Todo esto se realiza como parte del compromiso que tiene el organismo operador para garantizar la calidad del agua que llega a los hogares de las familias de Zacatecas, Guadalupe, Morelos y Vetagrande.
Otras instituciones como Conagua y la Secretaría de Salud de Zacatecas (SSZ) realizan muestreos de manera aleatoria. Además, por las características de la infraestructura de la Junta, en algunos tanques se mezcla el agua de diferentes sistemas, lo que mejora la calidad del líquido distribuido.
Cabe destacar que la población beneficiaria puede y debe contribuir a la calidad del agua, lo anterior al realizar el lavado y desinfección de tinacos y cisternas cada seis meses.