Después de más de 20 años en los que se buscó el retiro de las ladrilleras de la mancha urbana, el Ayuntamiento de Guadalupe logró un acuerdo histórico con la Unión de Ladrilleros del municipio, para que estos centros de trabajo sean reubicados lejos de las zonas habitacionales, donde sea posible concluir el proceso de cocimiento sin afectar a la ciudadanía.
Dando seguimiento a dicho acuerdo, y por instrucciones del alcalde de Guadalupe, Julio Cesar Chávez Padilla –y en coordinación con la Procuraduría Ambiental del estado, a cargo de Salvador Esaú Constantino Ruiz – el titular de la Dirección de Desarrollo Urbano, Ecología y Medio Ambiente del municipio, Guillermo Dueñas González, supervisaron el cumplimiento del convenio que suspende de manera definitiva la operación de los hornos cercanos a las zonas habitacionales.
Dueñas González informó que las tres ladrilleras que se encuentran ubicadas en la mancha urbana, serán reubicadas paulatinamente a un terreno donado para este fin, por gestión del Ayuntamiento.
En estas ladrilleras únicamente podrán realizarse trabajos de elaboración de ladrillos, pero el horno para la quema de los mismos tendrá que reubicarse, de lo contrario, serán acreedores a las sanciones correspondientes.
Las acciones del Ayuntamiento se realizan con estricto apego al respeto de las actividades económicas, ofreciendo alternativas para que se realicen en lugares más apropiados y con condiciones más adecuadas; y de la misma manera protegiendo los derechos de los colonos.