A fin de visibilizar, combatir y erradicar la pornografía infantil y el turismo sexual de menores, la senadora Geovanna Bañuelos de la Torre urgió al Gobierno Federal y a los gobiernos de las 32 entidades federativas a implementar, un Plan Nacional contra la Violencia Sexual contra Niñas, Niños y Adolescentes.
Tras la realización del foro Pornografía Infantil y Turismo Sexual en México: Una Triste Realidad y para dar seguimiento a los compromisos adquiridos, la Coordinadora del Partido del Trabajo, presentó un punto de acuerdo donde solicita que los ministerios públicos y juzgadores agilicen los proceso y garanticen el interés superior de la niñez y, en ese sentido, emitan sus sentencias, en materia de delitos sexuales y de trata de personas contra la infancia y la adolescencia.
“Violentar, vejar, denigrar la integridad física y espiritual de un menor de edad es una de las peores aberraciones que puede comete el ser humano”, enfatizó.
Además, pidió al Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, los ministerios públicos, las fiscalías y procuradurías registren y reporten de manera desglosada la incidencia delictiva asociada a la trata de personas y sexuales contra menores.
“Las estadísticas nos ayudarán a visibilizar más este problema”, sostuvo.
De igual manera, en el punto de acuerdo exhorta a las legislaturas de los estados a armonizar su normatividad local con las leyes federales en materia de delitos sexuales y trata de personas para que los castigos sean más severos y las víctimas accedan a la justicia.
Geovanna Bañuelos señaló que derivado del confinamiento generado por la pandemia, el consumo de pornografía infantil se incrementó un 70% de acuerdo con datos de la División Científica de la Guardia Nacional, por lo que hizo un llamado a los gobiernos Federal, Estatales y Municipales para fortalecer a la policía cibernética.
La legisladora por Zacatecas sostuvo que las niñas, niños y adolescentes deberían estar jugando, riendo o estudiando, o simplemente disfrutar de la inocencia propia de su edad que les permite construir mundos imaginarios. Sin embargo, existen personas y grupos de la delincuencia organizada que se aprovechan de su vulnerabilidad para convertir un negocio la explotación sexual infantil.
Por la naturaleza de los delitos, enfatizó es necesario que todos los cuerpos policiacos del país cuenten con un departamento o área especializada en delitos sexuales y se priorice la atención de la víctima. Asimismo, las fiscalías estatales deben contar con una fiscalía especializada para investigar este tipo de delitos.
Informó que de acuerdo con el Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna), la mayoría del turismo sexual lo realizan ciudadanos estadounidenses y canadienses quienes visitan México, durante periodos cortos, para generar pornografía infantil, retornar a sus países y comercializarlo.
“Esta problemática se agrava sustancialmente derivado de las grandes carencias sociales por las que atraviesan millones de niñas y niños mexicanos”, reconoció.
