En una visita inédita a la ciudad de Guadalupe, el tres veces campeón del mundo en el boxeo, Julio César Chávez González, ofreció una charla sobre su experiencia de vida en el Auditorio del Palacio Municipal al que asistieron autoridades de los tres órdenes de gobierno, instituciones educativas, deportistas, entrenadores, academias deportivas y público general de distintos municipios de la entidad.
Con compañía del Gobernador de Zacatecas, David Monreal Ávila, y del Presidente Municipal de Guadalupe, Julio César Chávez Padilla, el público asistente fue partícipe del diálogo que sostuvo el oriundo de Ciudad Obregón desde sus primeros pasos como boxeador hasta llegar al campeonato mundial en tres divisiones de peso diferentes.
Previo a la charla, David Monreal Ávila agradeció al campeón su visita al estado y, específicamente, a la ciudad de Guadalupe, así mismo a los otros excampeones mundiales Jorge ‘El Travieso’ Arce y Érik Él Terrible’ Morales por la exhibición boxística que tendrán por la noche de en el Gimnasio ‘Marcelino González’.
Monreal Ávila confirmó que, tras hablar personalmente con los expugilistas, Zacatecas será sede de grandes espectáculos de talla nacional e internacional en materia de boxeo, esto como parte de la promoción deportiva que desarrolla la Nueva Gobernanza.
El Presidente Municipal de Guadalupe quien agradeció la visita de Chávez González y mostrar su historia de vida al público que se dio cita en la ciudad, ya que –dijo– acudieron jóvenes deportistas, con participación en Juegos Olímpicos, estudiantes y un gran número de zacatecanos que están ansiosos de escuchar sus experiencias, y fue Chávez Padilla quien inició el diálogo preguntándole al tres veces campeón del mundo cómo es que nació el sueño de ser boxeador y si siempre supo que iba a lograrlo.
Tras presentar un video con los mayores logros de Julio César Chávez González, éste manifestó el agradecimiento a todos los zacatecanos que han hecho de su estancia una bendición, “todos los que estamos aquí tenemos un sueño de vida, el mío no fue en un principio el de ser boxeador, sino futbolista, pero gracias a mis hermanos que practicaban box me puse los guantes, ahí fue cuando me empecé a enfocar en mi nuevo sueño”.
El campeón relató que sus inicios fueron participando en torneos de su barrio y los ganó, “por eso: todos los sueños se cumplen, pero se necesita mucha perseverancia y disciplina”, manifestó. Asimismo, comentó que provenía de una familia humilde, y fue en el deporte donde encontró la posibilidad de que sus padres tuvieran una mejor calidad de vida, ayudándoles a que ellos también cumplieran sus sueños; tiempo después peleó en profesional y duró 14 años sin perder una pelea, narrando la dificultad de llegar a esos momentos de su vida, porque para lograrlo tuvo que vivir en otra ciudad, lejos de su familia.
También contó a los asistentes la manera en que después de mantenerse peleando para llegar a profesional tuvo la oportunidad de pelear por primera vez por un campeonato del mundo, ganándolo, “desde entonces mi vida cambió para siempre: fui el boxeador con más peleas de campeonato del mundo, con un total de 37, así como 10 defensas de campeonato y tener el Record Ginness de meter a 136 mil personas en el Estadio Azteca”, dijo el excampeón del mundo.
Pero el destino le traería más cosas: pelear por su segundo campeonato, defenderlo varias veces hasta llegar a un tercero en 3 distintas divisiones con todas las dificultades que representaron tan grandes hazañas. Con la euforia de los asistentes, Julio César Chávez González, llegó al momento más complicado de su vida: “no todo es felicidad, aunque los sueños se cumplen a base de esfuerzo y dedicación siempre habrá tropiezos y caídas, y es en ese momento cuando nos debemos levantar para no quedarnos en la lona”, ejemplificó el sonorense, para posteriormente contar el inicio de sus problemas con las drogas que afectó su carrera deportiva y su vida privada.
Fue en ese momento que el tres veces campeón mundial de boxeo se dirigió a las y los jóvenes deportistas, estudiantes y profesionistas para informar sobre la prevención de adicciones, motivándolos a hacer deporte, a ser mejores personas, agradecidos y muy dedicados en sus sueños.
Su mensaje final giró en torno al tema de no dejarse vencer, buscar y esperar a que sus sueños se cumplan, sacrificarse y trabajar fuerte en su futuro, “porque los sueños se cumplen y sé que los van a lograr”, terminó Julio César Chávez.