Tras condenar el asesinato a manos de la inseguridad desbordada en Zacatecas, el Magistrado Arturo Nahle García, expresó a nombre del Poder Judicial la sentida pérdida que se queda en la institución por uno de los jueces más entrañables y extraordinarios que ha tenido la institución; el Juez de Control y Tribunal de Enjuiciamiento, Roberto Elías Martínez.
En un sentido homenaje al Juez, ante familiares y los tres poderes del Estado, el Magistrado Nahle García, destacó que el Juez Elías Martínez tuvo un perfil profesional extraordinario con 30 años de servicio en el Poder Judicial y aun y cuando nunca dejó de capacitarse, su perfil íntimo, el humano fue muy superior; pues conformó una familia con principios, con valores, con amor, una familia tradicional, como la gran mayoría de las familias zacatecanas que hoy viven con miedo y zozobra por la inseguridad desbordada.
Dijo “se equivocan quienes creen que los delincuentes solo agreden a otros delincuentes, hoy le tocó a un apóstol de la justicia, a un juez, a quien todos los días dirime conflictos a través de la interpretación y aplicación de la ley, a quien tiene la alta encomienda de preservar nuestro deteriorado Estado de Derecho, a quien combate la impunidad, tal vez, el mayor de nuestros males”.
Por lo anterior, dimensionó la trayectoria del asesinato a un juez, dijo “no solo se priva de la vida a un hombre que por su profesionalismo y honorabilidad está dotado de fe pública y autoridad; no, se mata a uno de los encargados de que el pacto social persista, se mata a quien hace valer las reglas del juego que todos jugamos, el juego de la vida, del trabajo y de la vida en común”.
Ante esta situación, Nahle García expresó, “Aquí seguimos y seguiremos otras juezas y jueces, otras magistradas y magistrados y más de mil personas servidoras del Poder Judicial que sí, hoy estamos muy tristes, consternados e indignados por el cobarde asesinato de uno de nosotros, pero estamos de pie, más decididos que nunca a sumarnos a los esfuerzos de la mayoría para devolverle a Zacatecas la paz y la tranquilidad que los grupos delincuenciales nos han arrebatado”.
Y con firmeza puntualizó “la muerte de Roberto no nos amedrenta, nos inspira y nos compromete a seguir dándole a cada quien lo que por ley les corresponde, en eso consiste la justicia”.
