Ciudad de México. – Ante la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de la Cámara de Diputados y la Comisión Nacional de Tribunales Superiores de Justicia de la República Mexicana (CONATRIB), el Magistrado Arturo Nahle García, hizo una solicitud urgente y respetuosa para que se etiqueten los recursos necesarios para la implementación del Nuevo Modelo de Impartición de Justicia Civil y Familiar; de lo contrario, dijo, el Código Nacional de Procedimientos será letra muerta.
Nahle García dimensionó la relevancia de esta transición, pues significa el 70% de las cargas de trabajo de los poderes judiciales estatales, dijo, “es la justicia cotidiana del país” y haciendo un comparativo con el Poder Judicial de la Federación señaló que los poderes estatales reciben el doble del trabajo del Federal y resuelven con un presupuesto muy por debajo de la mitad del Federal.
Por lo anterior, dijo confiar en la sensibilidad, responsabilidad y criterio de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, para hacer realidad esta implementación de manera gradual y poder combatir así a la impunidad que tanto lastima al estado mexicano.
El Magistrado consideró al Nuevo Código de Procedimientos Civiles y Familiares como un arduo trabajo cuyo resultado solo puede rendir frutos con recursos para capacitación, construcción, equipamiento, difusión, para un verdadero cambio a la oralidad, un reto de cuatro años que solo puede ser posible con la unión de esfuerzos y propuso propiciar una Reunión con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público para gestionar los recursos correspondientes, mismos que deberán ser muy superiores a los que se invirtieron en el Nuevo Modelo de Justicia Penal y Justicia Laboral.