Grata Función del Folclor En los Escenarios de la Capital.

Un ambiente lleno de alegría y entusiasmo vivieron los zacatecanos y visitantes en el sexto día del Festival Zacatecas del Folclor Internacional (FZFI) “Gustavo Vaquera Contreras”, al vestirse los escenarios de la capital con la multiculturalidad de los distintos países que conforman las secciones programáticas de este importante foro, organizado por el Gobierno de Zacatecas, a través del Instituto Zacatecano de Cultura (IZC) “Ramón López Velarde”.

 

Las actividades de este viernes, en Plaza de Armas, incluyeron la participación de la Compañía de Danza Regional P´indekua, de Michoacán, que presentó las raíces musicales y dancísticas de su estado, como la ya tradicional y reconocida Danza de los viejitos.

 

A su vez, ESDANZA Compañía de Danza Escénica, de Zacatecas, y el Ballet Folklórico de la Escuela Superior de Zitralkiahuitl A.C., de Guerrero, continuaron deslumbrando al público en éste que es considerado el máximo foro del festival.

 

La Función de Gala en el Teatro Fernando Calderón contó con la participación de Polonia, a través del grupo The Song and Dance Ensemble Krakus, de la Universidad de Ciencia y Tecnología de Cracovia, así como las agrupaciones de Danza Folklórica Cuicoyan de Pinos y el Ballet Folklórico del Potosí del COBACH 01.

 

La jornada continuó en la Explanada del Congreso de Zacatecas con las presentaciones de Ensemble for Folk Songs and Dance Slavey, de Bulgaria, y la Compañía de Danza del CECADEE La Luz A.C, de Zacatecas, dejando a los asistentes maravillados con la diversidad y pasión que emanó a través sus actuaciones.

 

Este día culminó con la presentación de la Compagnie Christ-Danse, de Togo, y Groupe Aochan Créole Vivario, de Haití, ambas agrupaciones que llenaron de color y vida el escenario de la Plazuela Miguel Auza, donde se desarrolla el foro de música y fandango popular.

 

Aquí, la agrupación togolés Compagnie Christ-Danse ofreció una muestra de la riqueza de su región a través de danzas tribales, cantos tradicionales y enérgicos tambores, mientras que el Groupe Aochan Créole Vivario, de Haití, hizo vibrar a los asistentes con una mezcla única de bailes folclóricos y convertir a este escenario en un espacio lleno de energía y movimiento, donde la cultura de estas regiones se fusionó con la alegría de los espectadores.

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