En el marco del II Segundo Simposio Internacional de Cultura Ambiental y Desarrollo Sostenible, con sede en el Teatro Calderón, el Delegado en Zacatecas de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), Julio César Nava de la Riva, impartió la conferencia magistral “Semidesierto Zacatecano. Áreas Naturales Protegidas”. En la misma estuvieron presentes alumnos de la Unidad Académica de Ciencias Biológicas y la investigadora costarricense Jacqueline García Fallas, como invitada especial, además de público interesado en la temática.
Al presentar el proyecto para obtener la declaratoria del semidesierto zacatecano como área natural protegida, Nava de la Riva afirmó que ésta impulsará el desarrollo económico con sustentabilidad. Pero aclaró que esto no suspenderá la actividad minera, ni ninguna otra. “No morirá el semidesierto zacatecano”: Al darle continuidad a la actividad minera, como se ha hecho hasta la fecha, en automático aumentará la regulación y vigilancia de ésta, aseveró el delegado.
Con dicho proyecto –sustentado técnica y legalmente, según consideró Nava de la Riva–, se pretende impulsar opciones de actividades económicas diferentes a la minería: la producción de fibras, como la candelilla, útil para la industria farmacéutica, y otros productos, entre los cuales están los escamoles, los dátiles, los piñones, así como la miel para su exportación. En ese contexto, resaltó que Zacatecas tiene el primer lugar en la producción de orégano.
En la fase de preguntas y respuestas, los asistentes participaron con cuestionamientos enfocados principalmente hacia la devastación provocada por la minería, como lo manifestó uno de los asistentes proveniente de Mazapil: “Nuestras tierras no producen igual”. En respuesta, el Delegado de la SEMARNAT señaló que ese municipio y Concepción del Oro son las zonas en las que se registran problemas técnicos a causa de la actividad minera. Sin embargo –concluyó– se ha identificado potencial ecológico-biológico.