Raúl F. Silva/C58
El torrente de un aguacero borró el amarillo de Guadalupe; ahora las paredes del Palacio Municipal son verdes, blancas y rojas. Colores distintivos del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Ya lo dijo el mandatario estatal, Miguel Alonso, “hoy se respiran nuevos aires” en marco de la toma de posesión de Roberto Luévano Ruiz como primer edil de Guadalupe quien le respondió: “Bienvenido a Guadalupe, ahora si es su casa”.
La lluvia es un augurio de buenos tiempos, expresó el gobernador, minutos después de que le tomara protesta al nuevo munícipe para la administración 2013-2016.
Ambos priístas lucieron un semblante de felicidad, Guadalupe ya era tricolor oficialmente. Les costó mucho recuperarlo, pero después de 15 años lo consiguieron.
Desde la entrada a la presidencia municipal algo se notaba diferente. En el estacionamiento había camionetas y automóviles lujosos; al interior se colocaron dos salas para los que no pudieran caber en el auditorio municipal.
Las pantallas de plasma, majestuosos arreglos florales y sillas decoradas hicieron acto de presencia; se estaba en trance a una nueva etapa. Ambas salas no fueron utilizadas. Todos cupieron en el auditorio municipal.
En el recinto se colocó un tapanco en color rojo, y al fondo unas cubiertas grandes que colaban las siluetas de los integrantes de la banda de música del estado. Se iluminaron con el verde, blanco y rojo.
Roberto Luévano consideró a Miguel Alonso su amigo y maestro “porque le enseñó que la división de poderes no significa confrontación, sino la suma de fuerzas”.
Para el nuevo alcalde de Guadalupe, dirigir esta municipalidad este es el reto más grande de su vida, así lo hizo explicito en el acto protocolario.
A la par, explicó, que emulará las premisas del presidente Benito Juárez sobre el manejo del servicio público.
El ex diputado local dijo a los ciudadanos que después de 15 años regresa la justicia social a Guadalupe, y dedicó una parte del discurso a criticar la actuación de los últimos cinco alcaldes perredistas.
Señaló que el municipio “ha padecido un retroceso notable en los 15 años” donde gobernó el Partido de la Revolución Democrática (PRD).
Roberto Luévano se comprometió a realizar una reforma administrativa y eficientar el recurso público y a eliminar los dispendios en el quehacer gubernamental.
Dijo que atenderá las comunidades rurales y colonias urbanas, fortalecer el cuerpo de seguridad municipal con el Mando único, la instalación de un observatorio ciudadano.
Además, de trabajar con el programa Sumar de la administración estatal y la adaptación de un instituto municipal de planeación para establecer programas de desarrollo urbano y rural.
Se debe dejar de gobernar a ocurrencias de cada tres años, para que más allá de los colores de partido esté la responsabilidad del desarrollo.