Con el objetivo de sensibilizar a la población sobre la importancia de la detección oportuna del cáncer de mama mejorar, y mejorar el pronóstico y supervivencia de quiénes lo padecen, integrantes de la Asociación de Estudiantes del programa de Medicina Humana del Campus Fresnillo, llevaron a cabo el taller de “Elaboración de prótesis artesanales, impartido por el presidente de la asociación, Kevin Corral.
Al dar el mensaje de bienvenida, la directora de la Unidad Académica de Medicina Humana y Ciencias de la Salud (UAMHyCS), Rosa Martha Covarrubias Carrillo, incentivó a los alumnos a continuar desarrollando ese espíritu humano que debe tener un médico para desempeñar su trabajo de la mejor manera y para empatizar con los pacientes, y a su vez, brindarles todo el apoyo y hacerles saber que “la vida no se termina cuando se diagnóstica el cáncer, pues aún hay muchas cosas por hacer y por vivir”.
Después de recibir su prótesis, la beneficiaria María de los Ángeles, comentó que ella padeció cáncer de mama, e indicó que “es difícil resistir un tratamiento contra el cáncer”; además les habló a los presentes sobre lo importante que es tener un diagnóstico oportuno para evitar llegar a quitar una mama como fue su caso.
Fue en el aula de usos múltiples del Edificio de Medicina Humana en el Campus UAZ Siglo XXI, el espacio donde 40 alumnos del programa de la Licenciatura en Médico general del Campus Fresnillo, hicieron estos dispositivos externos que pueden ser utilizados después de una mastectomía, a los cuales una vez terminados, los estudiantes anotaron mensajes dedicados a las mujeres beneficiarias.
El costo del material para este taller se consiguió gracias a donativos que realizó la escuela de Medicina, y el docente Víctor Murillo, quien también tuvo a bien efectuar un donativo económico para costear la materia prima para elaborar 30 prótesis artesanales, en beneficio de 30 pacientes sobrevivientes de este padecimiento, señaló Kevin Corral, el encargado del taller.
“Los alumnos se mostraron sumamente colaborativos y lograron empatizar más allá de los temas que se ven en clase sobre esta enfermedad, pues el tener acercamiento con pacientes que lo han padecido, permite tener un mayor entendimiento y tacto humano con ellas, ya que, con este tipo de pequeñas acciones podemos hacer grandes cambios en la vida de alguien”, expresó el tallerista.
Esta actividad brindó la posibilidad de mejorar la calidad de vida de aquellas mujeres que han perdido una o ambas mamas debido a un procedimiento quirúrgico como tratamiento de esta enfermedad; y a los alumnos, se les dio la oportunidad de elaborar estás prótesis hechas de linaza, concluyó el especialista.
